Terapia Bioenergética



La bioenergía es la fuerza o substancia vital del Universo que caracteriza a cualquier organismo vivo. Es la energía cósmica que provee a los humanos, animales y plantas de energía vital.

Cuando nuestra energía está equilibrada estamos llenos de vitalidad y salud, en cambio cuando nuestro cuerpo está en desequilibrio, cualquier enfermedad puede fácilmente atacarnos.

Cuando estamos enfermos nuestro sistema inmune no está trabajando de manera eficiente en ciertas partes del cuerpo. Puesto que el cuerpo físico responde a las órdenes y las observaciones de nuestro cuerpo energético.


La Terapia Bioenergética es un método de curación y empoderamiento seguro, indoloro, no invasivo y eficaz que utiliza una serie de posiciones y movimientos especiales de las manos para equilibrar el campo energético del paciente, mejorando así la circulación energética del cuerpo y activar de nuevo al sistema inmunológico, permitiendo que el cuerpo comience su propio y natural proceso de autosanación.


Cualquier problema en el campo físico tiene antes una manifestación energética. La Terapia Bioenergética trata las causas subyacentes a las enfermedades, que se manifiestan en el campo energético como bloqueos, desequilibrios, exceso o carencia de energía. Estos desequilibrios suelen estar relacionados con el estrés y con las emociones. La bioenergía elimina esos bloqueos, restaura el equilibro, disminuye los niveles de estrés y por tanto permite a tu sistema afrontar mejor los desafíos a los que ha de enfrentarse diariamente.


Lo que un terapeuta entrenado en la práctica de la Bioenergía hace es:


  1. Elimina los síntomas (dolor, inflamación...) y las causas de la enfermedad al abrir y liberar los bloqueos físicos y emocionales del cuerpo, incrementando tu nivel de energía.

  2. Energiza el órgano o sistema dañado, permitiendo a tu cuerpo relajarse y sanarse a sí mismo.

  3. Equilibra todos tus sistemas (endocrino, circulatorio, linfático, nervioso, inmune, digestivo, respiratorio, cardiovascular, reproductivo, urogenital, muscular y esquelético).

  4. Libera tu potencial una vez liberados los obstáculos energéticos que impiden su expresión.

En última instancia es tu sistema inmunológico el que te cura. El terapeuta, a través de la bioenergía, le facilita el trabajo.